Gestión de residuos sandach

Cómo realizar una correcta gestión de residuos Sandach

Los subproductos animales no destinados al consumo humano (sandach) hacen referencia a los cuerpos enteros o partes de animales, productos de origen animal u otros productos obtenidos a partir de animales, que no están destinados a consumo humano.

Estos sandach se convierten en residuos que deben gestionarse para evitar que se generen riesgos para la salud humana, la animal o el medio ambiente, y especialmente, para garantizar la seguridad de la cadena alimentaria. 

La gestión inadecuada de estos subproductos fue la causa de diversas crisis alimentarias en la Unión Europea (UE), como los brotes de fiebre aftosa, la propagación de encefalopatías espongiformes transmisibles y la presencia de dioxinas en los piensos.

Crisis como estas, además de las consecuencias sanitarias, pueden tener repercusiones negativas más amplias en el conjunto de la sociedad, porque afectan a la situación socioeconómica de los ganaderos y los sectores industriales afectados y en la confianza de los consumidores sobre la seguridad de los productos de origen animal.

Es por esto, que la gestión de los residuos sandach debe comenzar desde que se generan hasta su uso final, valorización o eliminación, siguiendo una normativa, tanto europea como nacional, que la regula para garantizar que no se genere ninguno de los riesgos mencionados.

Para poder llevar a cabo esta correcta gestión, la normativa ha establecido una clasificación de los residuos sandach, en base a su peligrosidad y toxicidad:

  • Material de categoría 1: Los residuos sandach de esta categoría son los que tienen más riesgo de contaminar. Son portadores de enfermedades, sustancias prohibidas (p.ej. hormonas) o sustancias contaminantes ambientales (PCB, dioxinas, etc).
  • Material de categoría 2: en esta categoría se encuentran los subproductos que pueden causar riesgos para la salud, así como sustancias ilegales o contaminantes.
  • Material de categoría 3: aquí se incluyen los subproductos con un riesgo bajo de toxicidad. En este caso, hablamos de partes de animales aptas para el consumo humano que no se utilizan por motivos comerciales (sangre, cuernos, piel, etc.).

En función del tipo de residuo, los problemas que se evitan con la normativa que regula su gestión serán de mayor o menor importancia para los seres humanos, animales y medioambiente.

Su objetivo último es certificar la seguridad de la cadena alimentaria, tanto en las personas como en los animales.

 

¿Quién genera este tipo de residuos?

Los residuos sandach se generan en la producción primaria ganadera, en las industrias de transformación de alimentos de origen animal y en establecimientos alimentarios de comercio minorista.

En este sentido, nos referimos a:

  • Explotaciones ganaderas.
  • Mataderos.
  • Comercios minoristas.
  • Establecimientos de transformación de SANDACH.
  • Operadores nacionales e internacionales y aquellos de medios de transporte que operen a nivel internacional.

 

A fin de garantizar que, desde estos distintos sectores, se lleve una adecuada gestión de los residuos sandach, acorde con la normativa comunitaria vigente, se elaboró el Plan Nacional Integral de Subproductos de Origen Animal no Destinados al Consumo Humano.

Este Plan incluye una serie de medidas de ámbito informativo (manuales y guías divulgativas destinadas a los operadores de toda la cadena de sandach) que están dirigidas a mejorar la estructura y organización en el ámbito de la gestión de estos residuos, así como facilitar el acceso de toda la información relativa a la normativa comunitaria, tanto a operadores como a administraciones públicas.

Por tanto, el ámbito de actuación de este plan es el sector primario (explotaciones ganaderas, incluida la acuicultura), los mataderos e industrias alimentarias, mayoristas y minoristas, y las plantas y establecimientos de transformación y gestión de sandach.

 

Reglamento y normativa relativos a la gestión de residuos sandach

La normativa comunitaria de la que se parte para la establecer las bases de una adecuada gestión de los residuos sandach es el Reglamento (CE) nº. 1069/2009 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de octubre de 2009, por el que se establecen las normas sanitarias aplicables a los subproductos animales y los productos derivados no destinados al consumo humano y por el que se deroga el Reglamento (CE) nº. 1774/2002.

Este reglamento establece las normas en materia de salud pública y salud animal con el fin de prevenir y reducir al mínimo los riesgos que entrañan los sandach.

Este reglamento establece la realización de controles para la recogida de estos residuos, su transporte, su transformación, uso y eliminación. 

En él, también se realiza la clasificación de los sandach (categorías 1, 2 y 3) en función del nivel de riesgo para la salud humana y animal, y las condiciones de eliminación y uso para cada categoría.

Entre estas condiciones para la eliminación, se incluye la posibilidad de eliminación como residuo mediante incineración o coincineración, o en vertedero autorizado con arreglo a la Directiva 1999/31/CE, la posibilidad de compostaje o transformación en biogás (digestión anaeróbica) o el procesamiento mediante esterilización a presión o mediante métodos de procesamientos del artículo 15, apartado 1, párrafo primero, letra b) del Reglamento SANDACH (o alguno de los métodos alternativos aprobados en el Reglamento (UE) Nº 142/2011 de la Comisión de 25 de febrero de 20115 como, por ejemplo, la producción de biodiesel).

El Reglamento (UE) nº 142/2011 de la Comisión de 25 de febrero de 2011 establece las medidas de aplicación de las normas de salud pública y de salud animal aplicable a los sandach, dispuestas en el Reglamento (CE) nº 1069/2009 (Reglamento Sandach).

La aplicación de esta normativa europea en España se llevó a través del  Real Decreto 1582/2012, por el que se establecen las normas aplicables a los subproductos animales y los productos derivados no destinados al consumo humano (Real Decreto de Sandach).

Este Real Decreto de Sandach posteriormente fue modificado por el  Real Decreto 198/2017 y el Real Decreto 894/2013.

En cuanto a la normativa que regula cómo se han de tratar los subproductos animales en función de su destino, esta viene establecida por la Ley 22/2011, de residuos y suelos contaminados, recientemente derogada por la actual Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular.

Esta ley es de aplicación cuando los residuos sandach son destinados a incineración, a vertederos o van a ser utilizados en una planta de biogás o de compostaje.

Así mismo, la Ley de Residuos es de aplicación también en aquellos aspectos no regulados por el Reglamento Sandach.

De forma esquemática, podemos resumir normativa aplicable a los residuos sandach de la siguiente forma:

 

normativa sandach

(Fuente imágenes: nota sobre la aplicación de la normativa de residuos y de la normativa sandach a los subproductos animales destinados a operaciones de tratamiento de residuos).

 

La valorización energética, mediante digestión anaerobia, de los residuos sandach es una alternativa sostenible a la gestión de estos residuos. 

Esta permite la obtención de energía renovable (biogás) mediante un proceso que sigue las bases del modelo de economía circular y que sería aplicado a las empresas del sector primario, industrias alimentarias, mayoristas y minoristas, y las plantas y establecimientos de transformación y gestión de sandach.

Desde Genia Bioenergy podemos ayudarte a poner en marcha un proyecto de planta de biogás para tus residuos sandach que cumpla con la normativa vigente.

Para ello, te ofrecemos un servicio integral y personalizado con el que evaluar la viabilidad técnica y económica de tu proyecto.

 

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