Producir biogás a partir de estiércol ya es una técnica muy utilizada para dar salida a las toneladas de desechos contaminantes que cada día se generan como fruto de la ganadería. Estos desechos son un problema para el medio ambiente debido a que la materia orgánica, los microorganismos y los nutrientes que contienen son altamente contaminantes para la naturaleza.
Esta situación actual de deterioro del medio ambiente provocada por la actividad humana y los desechos producidos en la ganadería, ponen de relieve la necesidad de buscar nuevas formas de reducir la contaminación y de aprovechar los desechos generados para conseguir algo valioso para la sociedad. En este sentido, la producción de biogás a partir de estiércol es, sin duda, la solución que se estaba esperando.
Una vaca llega a producir de 30 a 79 kg de estiércol diarios, 3.5 kg si hablamos del estiércol producido por cada cerdo. Teniendo en cuenta esto, la cantidad de estiércol generada diariamente en los centros de producción ganadera suponen toneladas de una materia prima que apenas resulta útil en un primer momento. Y es que el tiempo necesario para conseguir que este estiércol sirva como fertilizante es de alrededor de 7 meses, lo que supone un largo tiempo de almacenamiento de una sustancia contaminante de la que derivan varios problemas.
Es por esto por lo que la producción de biogás a partir de estiércol se ha convertido en la solución más efectiva y eficiente a este problema en los últimos años. Producir biogás a partir de estiércol no solo permite reducir el impacto de estos desechos, sino también conseguir una fuente de energía renovable y respetuosa con el medio ambiente que nos ayude a tener una mayor independencia de los combustibles fósiles.
Cómo producir biogás a partir de estiércol animal
El estiércol producido por los animales es también un fertilizante ecológico, una forma de reutilizar los nutrientes que previamente se suministraron a los animales para abonar la tierra de cultivo de una forma natural y sin tener que recurrir a productos químicos.
En los sitios donde se combina agricultura y ganadería, el estiércol supone una forma de cerrar el ciclo. Pero, aunque tras el proceso de fermentación y transformación el estiércol se convierte en una materia con muchos beneficios para los cultivos, el tiempo necesario para que esto ocurra es bastante largo.
Sin embargo, producir biogás a partir de estiércol es un proceso sencillo y fácilmente aplicable en los lugares de producción ganadera a través de biodigestores. Produciendo biogás a partir de estiércol, ya no es necesario esperar 6 o 7 meses para poder dar un segundo uso al estiércol generado, y además, es posible obtener grandes cantidades de energía, convirtiendo esta materia en una fuente de energía renovable y sostenible. Con la producción de biogás a partir de estiércol se consigue abono y biofertilizantes en un tiempo mucho más corto, por lo que no solo resulta menos perjudicial para el medio ambiente, sino también más rentable.
Para producir biogás a partir de estiércol, las mezclas de este material deben ser tratadas anaeróbicamente. A través de biodigestores, los desechos se someten a la acción de bacterias que dan como resultado el biogás.
Descubre 5 cosas que no sabías sobre el biogás
Este proceso de tratamiento anaeróbico se divide en varias fases de hidrólisis, acidogénesis, acetogénesis y metanogénesis. Todas ellas tienen como último fin producir una mezcla de gases, entre los que predominan el metano y el dióxido de carbono, que forman el biogás.
Las etapas del proceso de producción de biogás a partir de estiércol se llevan a cabo de forma consecutiva con la acción de diferentes microorganismos en cada una de ellas y con la ausencia de oxígeno. Y aunque parezca un proceso complejo, con los dispositivos adecuados, su implementación en los medios rurales y centros de producción ganadera es sencilla, y tiene una gran rentabilidad para los productores.
Y es que producir biogás a partir de estiércol, es una forma de recuperar lo invertido, de reutilizar nutrientes e incluso de producir la suficiente energía como para autoabastecerse. De hecho, esta técnica ya ha sido implementada por algunos zoos, en los que han conseguido generar suficiente energía para todo el establecimiento sirviéndose del estiércol generado por los animales.
Principales beneficios de producir biogás a partir de estiércol animal
Producir biogás a partir de estiércol supone una reducción del daño que normalmente generan estos desechos animales al medio ambiente y una importante fuente de energía renovable, pero además, la producción de biogás a partir de estiércol tiene otros beneficios importantes:
- Un mayor aprovechamiento del amoníaco – el proceso de almacenamiento del estiércol para producir fertilizantes puede suponer una pérdida de hasta un 50% del amoniaco que contiene. Sin embargo, al producir biogás a partir de estiércol no solo se conserva todo el amoniaco, sino que incluso puede aumentar hasta un 15% su presencia.
- Fertilizantes con menos semillas de malas hierbas – las semillas de malas hierbas están muy presentes en el estiércol, y pueden germinar incluso después de haber sido digeridas por los animales. Pero al procesar el estiércol en los biodigestores, los fertilizantes que se obtienen apenas contienen estas semillas, y las pocas que contienen han reducido casi totalmente su capacidad de germinar.
- Eliminación de microflora patógena – el estiércol puede contener microorganismos que supongan un peligro para la salud de los animales, pero la microflora patógena se elimina al completo en las plantas de biogás.
- Presencia de elementos que intensifican los procesos microbiológicos en los fertilizantes – algunos elementos como el amoniaco suponen una activación de los microorganismos presentes en el suelo, sirviendo para acelerar los procesos microbiológicos considerablemente, y produciendo biogás a partir de estiércol es posible conservar estos elementos.
- Sin almacenamiento – al producir biogás a partir de estiércol utilizando biodigestores, ya no es necesario almacenar el estiércol por una larga temporada, sino que los biofertilizantes obtenidos se pueden aplicar directamente y serán efectivos desde el momento de su aplicación.
- Fertilizantes más duraderos y efectivos – los biofertilizantes no desaparecen de la tierra con la lluvia, como ocurre con los fertilizantes químicos, por lo que incluso cantidades mucho menores de biofertilizantes tienen efectos más duraderos en los cultivos.
- Menor impacto en la naturaleza – los fertilizantes químicos tienen efectos negativos y contaminantes tanto en los suelos como en las aguas, sin embargo, los biofertilizantes obtenidos en la producción de biogás a partir de estiércol son ecológicos y totalmente respetuosos con el medio ambiente, por lo que resultan una forma más sostenible de abonar los cultivos.
En definitiva, producir biogás a partir de estiércol es la forma más eficiente de rentabilizar recursos y de obtener todos los beneficios posibles del estiércol en un lapso de tiempo corto. Aprovechar una materia prima presente y abundante en casi cualquier lugar y que diariamente resulta una fuente de problemas en el mundo de la ganadería para obtener energía y biofertilizantes, es dar un gran paso hacia una mayor sostenibilidad y rentabilidad en el sector rural y la ganadería en general.