Los lodos de depuradora son residuos generados en gran cantidad, por los que requieren de soluciones sostenibles para su gestión

Soluciones sostenibles a la gestión de los lodos de depuradora

Las aguas residuales que generamos desde nuestros hogares, oficinas, áreas urbanas e industrias son derivadas a las plantas depuradoras, donde, tras someterlas a un tratamiento, generan un fango o lodo.

Este fango o lodo de depuradora es uno de los residuos más comunes que tenemos y que producimos en gran cantidad. 

Según datos del Registro Nacional de Lodos, en España se llegan a producir alrededor de 1.200.000 toneladas al año de este residuo.

Los lodos resultantes del tratamiento de las aguas residuales son una mezcla de sólido (sedimentos) y agua (95%) y su composición resulta variable, dependiendo de la carga de contaminación del agua residual inicial y de las características técnicas de los tratamientos llevados a cabo en ellas.

Estos tratamientos tienen el objetivo de concentrar la contaminación presente en el agua, por lo que, los lodos van a presentar una amplia diversidad de materias suspendidas o disueltas.

Algunas de estas materias tienen valor agronómico y otras con potencial contaminante como los metales pesados y los patógenos.

Entre las que tienen un interés agronómico se encuentran: la materia orgánica, el nitrógeno (N), el fósforo (P), el potasio (K), calcio (Ca), magnesio (Mg) y otros micronutrientes esenciales para las plantas.

Ante estas variaciones en la composición de los lodos, su caracterización, gestión y tratamiento no resultan sencillos, debiendo realizarse de forma adecuada para evitar problemas medioambientales.

 

Cómo se gestionan los residuos de las aguas residuales

Los lodos de depuradora se generan en las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) que son las encargadas de realizar los tratamientos correspondientes a estas aguas y de asegurar la correcta gestión de los lodos producidos.

Esta gestión de los lodos la puede realizar directamente la propia planta EDAR o encargarla a gestores autorizados, siempre en conformidad con lo que establece la Ley de residuos y suelos contaminados.

Esta gestión se realiza siguiendo los principios de la política de residuos relativos a la protección del medioambiente y la salud humana, y aplicando la jerarquía de residuos (prevención, reciclaje, valorización y eliminación).

Las orientaciones sobre la gestión de estos lodos de depuradora quedan recogidas en el Plan Nacional Integrado de Residuos (PNIR).

Siguiendo los principios de jerarquía de gestión de residuos, se debe primero prestar atención a la prevención de la contaminación en origen de las aguas residuales.

Esto implica disminuir la carga contaminante de estas aguas, antes de su llegada a la depuradora, lo que supone la implicación del sistema de saneamiento en su globalidad.

Los lodos luego generados, deben ser tratados para reducir su contenido en agua, patógenos y asegurar la estabilidad de la materia orgánica. 

Los tratamientos más frecuentes a los que son sometidos son:

  • La digestión anaerobia.
  • La estabilización aerobia.
  • El compostaje.

 

Una vez que se han tratado los lodos, su destino dependerá de su composición final, pudiendo ser aplicados en los suelos agrícolas (según el Real Decreto 1310/1990, de 29 de Octubre), incinerados (Real Decreto 815/2013, de 18 de octubre, por el que se aprueba el Reglamento de emisiones industriales y de desarrollo de la Ley 16/2002, de 1 de julio, de prevención y control integrados de la contaminación) o depositados en vertedero (Real Decreto 1481/2001, de 27 de Diciembre).

 

Plantas de biogás para la gestión de lodos

Buena parte de los lodos de depuradora que se generan tenían, hasta hace poco, como principal destino el uso agrícola.

Sin embargo, los problemas con el coste del transporte de una sustancia húmeda y la posible acumulación en el suelo productivo de microcontaminantes hacen necesario la búsqueda de soluciones alternativas, sostenibles, para un correcto aprovechamiento de este recurso.

Esta solución sostenible estaría en la valorización energética de los lodos, llevada a cabo mediante la digestión anaerobia en plantas de biogás, y obteniendo, con ello, biogás y biometano como recurso energético de calidad para su uso como energía térmica, eléctrica o biocombustible.

La digestión anaerobia consiste en la degradación de la materia orgánica, gracias a la acción de microorganismos y en condiciones de ausencia de oxígeno.

Este proceso biológico tendría lugar en el interior de unos reactores herméticos (digestores), bajo unas condiciones controladas de temperatura y humedad para optimizar el proceso.

El biogás obtenido puede aprovecharse como fuente de energía para la propia instalación (autoconsumo) o depurarse (upgrading) para mejorar su calidad, obteniendo así el biometano.
Este biometano, similar al gas natural de origen fósil, puede ser inyectado al sistema gasista o utilizarse como biocombustible (GNL y GNC) en vehículos preparados.

 

Compost a partir del digerido

El tratamiento de digestión anaerobia en los lodos de depuradora consigue reducir la cantidad de los mismos entre un 70-80%.

Los lodos restantes pasan a denominarse digerido o digestatos, y serían sometidos a un proceso de deshidratación y secado térmico (compostaje) para su aprovechamiento como fertilizante orgánico granulado.

Estos biofertilizantes resultan seguros al alcanzarse las temperaturas necesarias durante el proceso de compostaje para garantizar su higienización.

El resultado es un sustrato o enmienda orgánica de alta calidad que puede utilizarse como aditivo en los suelos agrícolas o para la recuperación de suelos degradados.

 

La valorización energética de los lodos de depuradora mediante la digestión anaerobia resulta una solución eficaz y sostenible para el tratamiento de estos residuos y reducir su impacto ambiental.

Un proceso que se enmarca dentro de los principios del modelo de economía circular y acorde con los objetivos de la Unión Europea para lograr la transición energética.

Desde Genia Bioenergy ponemos a tu disposición esta tecnología que permitirá mejorar la gestión de los lodos de depuradora y aprovechar su potencial para generar energía renovable y otros productos de interés.

 

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