La correcta gestión de residuos constituye un elemento clave para avanzar hacia una economía circular, no contaminante, que permita aumentar la protección de la salud humana y el medioambiente.
Este es uno de los objetivos de la Unión Europea y, por ello, se han llevado a cabo modificaciones legislativas en materia de residuos, tanto a nivel comunitario como estatales.
Una de estas modificaciones legislativas es el nuevo Reglamento sobre el Traslado de Residuos, publicado recientemente por la Comisión Europea.
En este nuevo reglamento se establecen requisitos más estrictos para el traslado transfronterizo de residuos, impone una mayor responsabilidad a los agentes del sector y afectará significativamente al mercado europeo de residuos.
Una de las razones por las que se ha modificado el anterior reglamento es la simplificación de los traslados de residuos en el mercado interior de la UE, y con ello desarrollar una economía circular fuerte y resistente de acuerdo con el Green Deal de la UE.
Además, esta nueva normativa tiene el propósito de reducir la exportación de residuos a países no pertenecientes a la OCDE.
Según la propuesta, la exportación de residuos de la lista verde sólo se permitirá a terceros países que acepten oficialmente la importación y puedan demostrar la eliminación sostenible de los residuos.
El reglamento también pretende intensificar la acción contra los traslados ilegales y los delitos relacionados con los residuos, estableciendo normas de sanción para las actividades ilegales.
Junto a este nuevo reglamento, la normativa europea y, a nivel estatal, la reciente Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, establecen medidas concretas y exigentes con objetivo de encauzar la gestión de residuos hacia la aplicación de mejores prácticas y la consecución de objetivos.
Unas medidas que deberían verse reflejadas de forma evidente en la gestión de la fracción de biorresiduos, en lo que respecta a:
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- La etapa de recogida selectiva de residuos, con la obligatoriedad de recoger de forma separada los biorresiduos de origen doméstico, antes del 30 de junio de 2022 para las entidades locales con más de cinco mil habitantes, y antes del 31 de diciembre de 2023 para el resto. Para los residuos comerciales e industriales, tanto gestionados por las entidades locales como de forma directa por gestores autorizados, también se establece la obligatoriedad de separarlos en origen antes del 30 de junio de 2022.
- Los condicionantes de calidad de los biorresiduos, estableciendo un porcentaje máximo de impropios del 20% desde 2022 y del 15% desde 2027.
- Los objetivos de preparación para la reutilización y reciclado (valorización) de residuos municipales, incluyendo los biorresiduos.
- La reducción al 10%, o menos, en la cantidad en peso de residuos municipales vertidos, en relación al total de residuos generados de este tipo, para el 1 de enero de 2035.
- La limitación en la cantidad total (en peso) de residuos municipales biodegradables destinados a vertedero.
- La introducción de incentivos económicos: nuevo impuesto estatal sobre el vertido e incineración y las ayudas derivadas de los paquetes de fondos NextGenerationEU para la mejora de la gestión de residuos municipales.
Ahora bien, según los datos reflejados en la Memoria anual de generación y gestión de residuos. Residuos de Competencia Municipal 2020, publicada por el Ministerio para la Transición Energética y Reto Demográfico, se dan ciertos indicadores que reflejan que estos avances en materia de gestión de residuos resultarían escasos.
Por lo tanto, es necesario avanzar con las estrategias de gestión de residuos, en particular con los biorresiduos al tratarse de un recurso transversal con relaciones e impactos en muchos ámbitos, para mejorar y lograr los objetivos marcados desde la UE.
Nueva normativa europea para el traslado de residuos
La nueva normativa europea para el traslado de residuos, adoptada desde el pasado 17 de enero de 2023, incluye una serie de nuevas medidas con el fin de mejorar la gestión de los residuos y reducir su impacto ambiental.
Entre estas medidas, podemos destacar las siguientes:
- La creación de regulaciones más estrictas para el transporte de residuos peligrosos, incluyendo la necesidad de contar con una licencia específica para su transporte y de cumplir con estrictos estándares de seguridad.
- Se establecen requisitos de trazabilidad de los residuos, incluyendo la necesidad de llevar un registro detallado de su origen, destino y composición, a fin de evitar el transporte de residuos peligrosos a través de fronteras sin autorización.
- La promoción del reciclaje y la reutilización de materiales con la creación de incentivos para las empresas que adopten prácticas sostenibles. Esto contribuirá a reducir el depósito de residuos en vertedero y aumentará la eficiencia en el uso de los recursos naturales.
- Mayor exigencia en responsabilidad ambiental de los productores, que deberán asumir una parte de los costes de gestión de los residuos que generan. Con ello se alienta a las empresas a reducir los residuos generados y a desarrollar productos más sostenibles.
Estrategias e instrumentos de mejora para la gestión de biorresiduos
En cuanto a los biorresiduos, las estrategias e instrumentos que se deberían incorporar para lograr mejores resultados en la gestión, vienen a ser:
- Planificar de forma integral la gestión, con hojas de ruta claras para las CCAA y municipios. Para ello, se deben considerar los modelos de recogida e instrumentos complementarios, las necesidades de adaptación e implantación de plantas de tratamiento, priorizando las de proximidad, e incorporando, cuando sea óptimo, modelos basados en compostaje individual.
- Implantar modelos individualizados y eficientes, complementados con mecanismos para minimizar los impropios (p.ej. servicios de recogida puerta a puerta).
- Fomentar al máximo las recogidas puerta a puerta para los residuos comerciales y para otros residuos asimilables a municipales. Aplicar un seguimiento y control por parte del ente local de los servicios de recogida privada para residuos comerciales y asimilables.
- Desplegar campañas de implementación de recogidas y servicios de comunicación y seguimiento del usuario en continuo. Aportar los materiales para facilitar la separación en origen, como cubos y bolsas compostables.
- Introducir sistemas eficientes para reportar los datos (cantidades, calidades y destinos) y disponer de caracterizaciones periódicas.
- Aprovechar las inversiones de las ayudas NextGenerationEU para implementar modelos eficientes y definitivos que sean capaces de aproximarse a los objetivos.
- Fomentar la formación, llegar a consensos políticos en materia de residuos e incrementar los recursos humanos destinados a la gestión de residuos, para dar respuesta a las necesidades de implementación y operación de modelos más avanzados.
Todo un conjunto de medidas y estrategias que tienen el objetivo de mejorar la gestión de los residuos, y a las que Genia Bioenergy quiere contribuir, aportando su conocimiento técnico en esta materia. Con nuestro servicio integral y personalizado, podemos evaluar e implantar juntos la mejor solución para la gestión de tus residuos orgánicos, más sostenible y acorde con la normativa.